Nos encontramos ante uno de los capítulos más tristes de la temporada. Pero vamos a ver que ha pasado.

Camille despierta tras ser mordida por Lucien y se da cuenta de la enormidad de lo que Lucien le ha hecho: va a morir. Aunque el vampiro está presente cuando ella despierta, Cami le ataca y consigue huir de su propia casa, buscando a Klaus. Cuando le encuentra, le pide que no se deje llevar por la ira cuando sepa lo que Lucien le ha hecho y le dice que le quiere. Klaus no está dispuesto a dejar que muera y así se lo dice, llevándosela en brazos hasta su casa cuando ella se desmaya.

En la casa están todos buscando una posible cura. Llega Vincent, muy preocupado e incluso Marcel llama a Davina, que está enfrentando sus propios demonios con Kol. Surge la idea de que quizás la mordedura de Lucien se cure con la propia sangre de Lucien y el antiguo regente se ofrece voluntario para ir hasta el apartamento de Cami y recoger la sangre del vampiro que Cami ha conseguido sacarle al atacarle. Hayley piensa que la sangre de Hope también puede ayudar y se marcha con Elijah para ir a buscar a su hija. Davina, por su lado, tras discutir con Kol porque no quiere dejarla ir, se marcha a sacarle la verdad a Lucien de como salvar a Cami.

Mientras esperan, Klaus y Cami hablan largo y tendido de su pasado, de su presente y ella le afirma que está en paz con la idea de la muerte. Incluso le pide a Klaus que le ayude a redactar el testamento, pero Klaus, aunque en un inicio accede, no está dispuesto a perderla.

Davina llega a un bar donde Lucien está montando una fiesta y lanza un hechizo para dormir a todos los presentes excepto a Lucien. Al vampiro intenta lanzarle un hechizo de la verdad, pero Lucien, protegido por los ancestros, es totalmente invulnerable y no le afecta para nada, aunque igualmente está dispuesto a contestar las preguntas de la joven bruja. Finalmente le dice que su mordedura no tiene cura y que Cami morirá y también le insinúa que ella morirá a manos de Kol. Cuando Davina le recrimina más tarde a Kol que le mintiera, este le confiesa que quiere matarla, que su sed por beber de ella le está matando y que quiere que lo duerma para que ella pueda estar a salvo. La joven bruja le clava un puñal y lo duerme, entre lágrimas.

Vincent consigue la sangre de Lucien y se la lleva a Cami pero no funciona. Tampoco funciona la sangre de Hope, y Cami empieza a empeorar rápidamente. Klaus crea un mundo en la mente de ella, junto a él donde todo es color, música y vida, para intentar que tenga la muerte más apacible posible. En ese mundo irreal, los dos hablan de recuerdos mutuos, esperanzas y sentimientos. Cami le dice a Klaus que es querido, y que no se rinda nunca porque el amor le hará fuerte. Klaus le confiesa que la ama y ella entonces se derrumba, porque no quiere morir. Finalmente muere en brazos de Klaus, mientras su cuerpo físico muere también sobre la cama, con su mano agarrada a la del vampiro original.

Davina llega a la casa de los Mikaelson justo después de morir Cami y estalla en lágrimas en los brazos de Marcel. Todos lloran la muerte de la terapeuta. Hayley y Vincent se despiden de ella, y Elijah le dice a Freya que eso no ha terminado y que ahora más que nunca deben destruir a Lucien.

La joven bruja vuelve junto a Kol y en ese momento los ancestros provocan un temblor en la ciudad mientras sacan la daga clavada en Kol. El vampiro despierta y ataca a Davina…¿Matándola?

Eso lo sabremos en el próximo capítulo. Os dejo el avance.