The Vampire Diaries- 6×21: Una boda y ¿un funeral?
Un solo capítulo nos separa del final de los finales. Está semana TVD ha tenido el amor como protagonista y un regreso por la puerta grande. Si queréis todo lo que ha pasado, quién se ha casado y quién ha vuelto para causar el caos, puedes leerlo a continuación.
Si eres fan de esta serie ya estarás más que acostumbrado y te repetirás una y otra vez que «los finales felices no existen». Y esta vez ha vuelto a ocurrir. El capítulo se las prometía tranquilas y felices con la celebración de la boda de Jo y Alaric. Todo era de color de rosas: la celebración en marcha, Caroline recuperada, Elena humana…y todos en su lugar original y recomponiéndose como hacía en las primeras temporadas.
Pero ¡cuidado! esto es como el ojo del huracán, parecía la falsa calma. Lo primero que empieza a tambalearse es Delena humanos. Stefan, Elena, Caroline… Todo el mundo duda de que Damon quiera realmente tomarse la cura con Elena y ser humanos y enamorados hasta que la muerte les separe. Y Stefan lleva a cabo una de sus tácticas para hacer a su hermano consciente de cómo sería su vida si fuera humano.
Las imágenes que Stefan le crea a Damon nos dejan ver una futura vida humana de Damon y Elena, pero, para disgusto de todos los fans, no tan ideal como nos lo imaginábamos. Mientras Elena consigue su sueño de trabajar en un hospital parece que Damon no acabaría de encontrar su sitio, y las fisuras y discusiones serían continuas en la pareja, dejando a entrever lo desdichado que sería el mayor de los Salvatore sin tener la oportunidad de recuperar su vida vampírica.
Parece a que Damon todo esto no hace nada más que enfadarle porque él sigue convencido de que la mejor opción es ser humano al lado de Elena. En el final del capítulo, en unas escenas Delena que os derretirán el corazoncito (contando el encuentro más que cercano al más puro estilo telenovela antes de la boda), somos por fin conscientes de que está más seguro de lo que pudiéramos haber llegado a imaginar.
Y todo esto con la boda de fondo. Entre alguna que otra duda de última hora y con la organizadora Caroline al mando llegamos al punto álgido de la temporada. Por fin veíamos como Alaric tenía su momento, uno lo suficientemente dulce como para olvidar todo el amargor de otras temporadas (acordaros de que perdió a su mujer, a su amor Jenna, que murió, que resucitó…)
Pero no, no era la ocasión de ser felices. Y eso que como os he adelantado todo tenía la pinta de que sí. Jo estaba radiante, teníamos a todos los personajes de Mystic Falls en un precioso entorno y todo era paz y armonía, Damon y Elena de padrinos lanzándose miraditas, Jo nerviosa y Alaric tremendamente enamorado.
La verdad es que este capítulo ha estado repleto de momentos de amor, Caroline y Stefan han aclarado un poco las cosas en un encuentro que pensábamos que no sería tan cercano, Damon y Elena a lo suyo…y no solo de parejitas, sino que la unión con la familia de Jo es muy potente, el trío de amigas Caroline-Bonnie-Elena reaparece con fuerza y el tandem Damon-Alaric como siempre.
Y es que de verdad, parecía mentira hacía donde giró el momento feliz. Algo podíamos intuir cuando vimos a Kai con intenciones de regresar a Mystic Falls, pero nunca pensamos que lo haría en el momento más inoportuno. Es cierto que era el más adecuado en cuanto a daño nos referimos, pero, estábamos tan agusto con lo que estaba sucediendo que hasta me cuesta describir un poco lo que pasó.
Así que por eso he optado porque lo veáis en el gif. Y siguiendo con el huracán que utilizabamos al principio, llegó el desastre máximo. Kai y su particular humor llegó para arruinar la fiesta. La primera en caer fue Jo, que tras recibir unas puñaladas en el estómago cae en brazos de su amado. Y, ante la atónita mirada de todos los asistentes, comienza la venganza de Kai contra el mundo.
Si pensando que con terminar con Jo era suficiente, Kai aprovechó que estaba por allí su familia y todos los que le habían hecho daño para con sus nuevos poderes arrasar con el lugar. Todo el mundo al suelo, la estructura se derrumbó por completo
, las lámparas y cristales encima de todos…¡que hecatombe todo!
Probablemente en el próximo capítulo descubramos las bajas que ha causado Kai en Mystic Falls, pero, el capítulo terminó con una de las imágenes esperadas pero menos deseadas. Los fans en las redes estábamos rezando para que los guionistas no terminaran con la vida de Elena de esta forma, que se merecía un final especial, pero todo apunta a que la primera de las víctimas de la boda será ella.
En la próxima review ya podremos comentar más tranquilamente que os está pareciendo el principio del fin de la historia de Elena Gilbert, pero, de momento, a mí ni me gusta ni me disgusta. Es una sensación agridulce porque preveo que la reacción de Damon si esto sucede de verdad va a ser épica, pero no, Elena no se merece un final así. Lo que sí espero y deseo desde aquí es que todo esto sea tan solo un engaño y nos den la vuelta en el final, y visto los últimos finales (especialmente el de la temporada pasada) estoy convencida de que lo harán.
Y llegamos,entre líos y más líos, a la season finale (una pena ya que parecía que estaban recuperando el ritmo que tanto nos gusto al principio de la serie) y viendo la promo no nos augura un momento feliz. Mi consejo para este último capítulo: muchos cleenex para pasar el disgusto y un buen helado para superar la depresión que se avecina. No os podéis perder la despedida de Nina Dobrev de TVD y las pistas que seguronos da este capítulo para la próxima séptima temporada centrada en los hermanos Salvatore.
Publicado el 14/05/2015 en Series y etiquetado en The Vampire Diaries. Guarda el enlace permanente. Deja un comentario.
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